Saludos. El presente es parte de una serie de artículos que serán publicados en el sitio oficial de la Escuela de Armas Bellatores (Lima, Perú), con la cual tengo el gusto de colaborar en esta iniciativa. Un agradecimiento a Daniel Guerrero, instructor de la escuela, y también al resto de sus miembros, por permitirme compartir este trabajo.
Escuela de Armas Bellatores (sitio oficial): https://esgrimabellatores.com/
ESPADA ROPERA
El arma icónica de los mosqueteros de Alejandro Dumas, la espada ropera (“rapier” en inglés) es el término asignado a cierta clase de espada portada por una persona cuando iba en ropa de civil. El término ropera aparece por primera vez en las “Coplas de la panadera” de Juan de Mena, escritas entre 1445 y 1450, y posteriormente en el “Inventario de Objetos del Duque D. Álvaro de Zúñiga” que data de 1468 (1). En el francés medio figura por primera vez como espee rapiere en 1478, término que eventualmente se convertirá en el rapière y rapier del francés e inglés modernos respectivamente.

La espada ropera surge en el siglo XV en España, y su uso se extendió hasta finales del siglo XVII. En sus principios, la espada ropera era muy similar a la spada da lato o sidesword (“espada de lado”), la cual es una espada de punta y corte que se usa a una mano, aunque de hoja más ancha que la ropera y de menor longitud, muy popular a finales del siglo XV. No obstante, con el tiempo estas primeras espadas roperas se harían mucho más largas que las mismas sideswords al ir especializándose más en la estocada que en los cortes, convirtiéndola en un arma de uso civil principalmente, ya que sus largas dimensiones la volvieron poco versátil para el combate en formaciones.

A grandes rasgos, la espada ropera cuenta con una hoja recta, larga y estrecha, y una guarnición compleja. Suelen tener una longitud total de entre 90 y 130 centímetros desde el pomo a la punta y pesar poco más de un kilogramo; el punto de equilibrio suele situarse entre los 8 y 15 centímetros desde el arriaz a la hoja, y el arma se esgrimía a una sola mano, aunque también podía hacer juego con algunas otras armas secundarias en la mano izquierda (un broquel, una daga, e incluso una capa). Aquí es importante señalar que las variaciones con respecto a los criterios de las dimensiones apropiadas para estas espadas dependen de las recomendaciones propuestas por los maestros de las diversas tradiciones de esgrima y también de los cambios generados en el contexto histórico en el que se emplearon estas armas.

Como se mencionó antes, las espadas roperas cuentan con una guarnición compleja, muy elaborada, las cuales también corresponden a la evolución misma que experimentó en el tiempo. Las primeras espadas roperas poseían una guarnición de lazo; su origen se sitúa a fines del siglo XV, y estaba conformada por unos gavilanes (parte que conforma la cruz de la espada) estrechos y prolongados que se entrelazan entre sí formando arcos de varios anillos, conformando así el guardamano que debía proteger la extremidad de quien empuñaba la espada ropera. Sin embargo, esta guarnición no resultaba totalmente efectiva ya que la punta de la espada del adversario podía atravesar la empuñadura y dañar la mano del espadachín, a pesar de que quienes empuñaban estas espadas vestían guantes de piel. Esto obligó a introducir nuevos elementos para dificultar el riesgo de lesión.

Con el tiempo nace la guarnición de concha, conformada por pequeñas placas de hierro que se ensamblaban a la cruz de la espada ropera, esto con el fin de añadir más protección a la mano. Esta es una guarnición típicamente española, práctica y resistente, y gozaría de un periodo de popularidad extremadamente largo, pudiendo encontrarse ejemplares entre 1640 y 1790 (2).

Contemporánea a la guarnición de concha hace aparición la guarnición denominada cazoleta de taza, cuyo objetivo era intensificar la protección del guardamano. Para ello, se situaba una pieza de hierro o acero con forma semicircular similar a una taza unida a los gavilanes actuando como protección.

Existen varias tradiciones de esgrima con la espada ropera, particularmente en las regiones de lo que actualmente son Italia, España, Alemania, Francia e Inglaterra, y dado que es poco factible abarcarlos a todos en un documento de esta naturaleza, por ahora solo nos remitiremos a unos pocos maestros de la tradición italiana y la española, las cuales probablemente son las que gozan de mayor popularidad en la comunidad de esgrima histórica en la actualidad.
ESCUELA ITALIANA DE ESGRIMA

Ridolfo Capo Ferro
Ridolfo Capo Ferro fue un maestro de esgrima italiano del siglo XVII. Nacido en el pueblo de Cagli, en Urbino, se sabe que también residió en la ciudad de Siena y que tuvo cierta asociación con la corte de Urbino (3). Capo Ferro fue el autor de un manual de esgrima sobre espada ropera titulado Gran Simulacro dell’Arte e dell’Uso della Scherma, el cual fue publicado en Siena hacia 1610. El tratado de divide en dos partes, “Arte” y “Práctica”: la primera parte versa sobre los principios generales de la esgrima, mientras que la segunda cubre las técnicas en sí, incluyendo además algunas ilustraciones. Su obra presenta la curiosidad de que, pese a que denigra ciertos métodos empleados por otros maestros en su teoría, los aplica en las acciones que él mismo describe; por ejemplo, Capo Ferro sostiene que las fintas son tan inútiles como peligrosas, aunque las usa deliberadamente en varias acciones de la segunda parte de su libro. Capo Ferro recomienda utilizar una espada que sea “dos veces más larga que el brazo, y tanto como mi paso extraordinario (fondo), cuya longitud corresponda igualmente a aquella que hay desde mi axila hasta la suela de mi pie” (4); siendo así, la espada adecuada para una persona de aproximadamente un metro ochenta debería tener alrededor de 135-137 centímetros de largo.
Con respecto a la postura inicial, uno debe mantener la siguiente posición (asumiendo que el tirador sea diestro): la punta del pie derecho debe estar dirigida hacia el oponente, mientras que el pie izquierdo se coloca de manera oblicua al derecho, alineado también con el hombro izquierdo; la pierna derecha se mantiene extendida, flexionando la rodilla izquierda, pues será sobre la que se apoye el cuerpo dado que éste se echa un poco hacia atrás; el torso debe estar un poco ladeado para reducir el área disponible que pueda atacar el enemigo; el brazo derecho debe apuntar al oponente, con el codo ligeramente flexionado; el brazo izquierdo se flexiona de tal forma que el codo esté apuntando hacia atrás y el brazo esté alineado con el muslo izquierdo, con la mano cerca al pecho, tal y como lo demuestra la figura C en la ilustración. De esta forma, se puede lanzar una estocada extendiendo el brazo y avanzando con el pie derecho (el izquierdo puede permanecer en su sitio o también se puede mover hacia adelante para completar el movimiento, dependiendo de la situación), estirando también el brazo izquierdo que se hallaba replegado para conseguir algo de impulso y equilibrio adicional.

Salvatore Fabris
Salvatore Fabris fue un caballero italiano y maestro de esgrima entre los siglos XVI y XVII. Nació en Padua alrededor de 1544. En su tratado, él se describe como Supremus Eques (“Caballero Supremo”) de la Orden de los Siete Corazones, y en la introducción de la ediciónde 1676, Johann Joachim Hynitzsch lo identifica como Coronel de la Orden, por lo que se cree que no solamente fue un caballero de la orden, sino que alcanzó un alto rango en ella y que quizá llegó a liderarla en algún momento. Asimismo, en 1601 Salvatore Fabris fue contratado como instructor principal de espada ropera en la corte de Christianus IV, rey de Dinamarca y sobrino del duque Johan Frederik, donde sirvió por un periodo de cinco años, al final del cual, y por insistencia del rey, elabora su obra Lo Schermo, overo Scienza d’Arme, la cual es también financiada por el rey y publicada en Copenhague el 25 de setiembre de 1606 (5). La primera parte de su tratado cubre la esgrima con la espada ropera, espada ropera y daga, y espada ropera y capa, mientras que la segunda incluye un apartado en el que menciona diversas técnicas que se pueden utilizar para derrotar a un oponente sin detenerse en una guardia, tanto para la espada ropera como para espada ropera y daga, algo único entre los tratados italianos del siglo XVII. En lo que a postura concierne, Fabris opta por una algo distinta a la descrita por Capo Ferro: asumiendo que el tirador es diestro, el pie derecho va delante del izquierdo, apuntando al oponente, y se flexionan las rodillas, pero el torso se debe inclinar hacia adelante, lo mismo que la cabeza; la espada se sostiene delante del torso, sea con el brazo derecho flexionado o completamente estirado, y la mano izquierda se coloca a un lado del rostro, completamente abierta, tal y como se detalla en la siguiente ilustración:

A continuación, mencionaremos algunos otros tratados importantes en la escuela italiana que versan sobre la esgrima con la espada ropera con su respectivo autor:
– “La Scherma di Francesco Fernando Alfieri” (1640) de Francesco Fernando Alfieri.
– “Nobilissimo discorso intorno il schermo” (1580) de Girolamo Cavalcabo.
– “Trattato di Scientia d’Arme, con vn Dialogo di Filosofia” (1553) de Camillo Agripa, que si bien es un tratado sobre la spada da lato, fue muy influyente en la tradición de espada ropera italiana e incluso en la tradición española.
– “Scola, overo teatro” (1606) de Nicoletto Giganti.
– “Ragione di adoprar sicuramente l’Arme” (1570) de Giacomo di Grassi.
– “Dialogo di Girolamo Lucino, da Casalmaggiore, del vso della spada” (1589) de Girolamo Lucino.
VERDADERA DESTREZA

Jerónimo Sánchez de Carranza
Jerónimo Sánchez de Carranza fue un caballero español, filósofo y maestro de esgrima del siglo XVI. Se cree que nació en Sevilla en 1539, y que su familia era noble, recibiendo una buena educación. Ya adulto, fue nombrado caballero, y luego Comandante de la Ordem do Hábito de Cristo. Sirvió también como gobernador de Sanlucar de Barrameda en representación del Duque de Medina Sidonia, y de 1589 a 1594 fue gobernador real de Honduras. A su retorno en España sirvió como Maestro de Armas Principal de la corte real (6). En 1569 publicó su tratado De la Filosofia de las Armas y de su Destreza y la Aggression y Defensa Cristiana, el cual constituye las bases del sistema de esgrima denominado Verdadera Destreza. Este tratado consta de cuatro diálogos, en los cuales detalla los fundamentos de la esgrima, las causas y efectos naturales de la destreza y al estudio del honor. En síntesis, la Verdadera Destreza tiene el propósito de explicar la esgrima como un cuerpo de conocimientos apoyados sólidamente en la geometría que permita ofrecer un método de combate universal para todas las armas (espada ropera, daga, espada y broquel, montante, etc.).

Luis Pacheco de Narváez
Don Luis Pacheco de Narváez fue un filósofo y maestro de esgrima español del siglo XVII. Nacido en Baeza, Jaén alrededor de 1570, llegó a convertirse en maestro mayor de esgrima del rey Felipe IV. Inspirado por la obra de Carranza, se volvió en uno de los autores más prolíficos de tratados de esgrima, publicando su primer tratado sobre Verdadera Destreza “Libro de las Grandezas de la Espada” poco después de 1600, tras el cual publicó otros ocho manuales de esgrima más, incluyendo una edición revisada del tratado de Carranza De la Filosofia de las Armas y de su Destreza y la Aggression y Defensa Cristiana en 1612. Su mayor trabajo, Nueva ciencia, y filosofía de la destreza de las armas, fue escrito en 1632, aunque parece no haber sido publicado sino hasta 1972, mucho después de su muerte (7).
Francisco Lorenz de Rada y Arenaza
Francisco Lorenz de Rada y Arenaza fue un maestro de esgrima, militar y escritor del siglo XVII. Su carrera militar inició en 1682 cuando se integró a la Armada del Mar Océano, siendo primero soldado, luego capitán de Infantería y finalmente maestre de Campo. Le fue otorgado el título de Caballero de Santiago en 1694, y posteriormente fue enviado a las colonias del continente americano, donde fue gobernador de Veracruz, canciller mayor de las Reales Audiencias y registrador perpetuo de los reinos de Nueva España. Según uno de sus escritos, él estuvo a cargo de las baterías de la Batalla de Rande de 1702. El rey Felipe V le concede el título nobiliario de marqués de las Torres de Rada en abril de 1704, y al año siguiente publica su libro “Nobleza de la Espada”. Fue partidario de las enseñanzas de Pacheco de Narváez, aunque se considera también que subsanó algunas de las faltas de sus tratados (8). Su obra permitió delinear de manera más precisa las enseñanzas de la Verdadera Destreza, haciéndola relativamente comprensible para el lector moderno.
A continuación, mencionaremos algunos otros tratados importantes que versan sobre la Verdadera Destreza con su respectivo autor:
– “Compendio de los fundamentos de la verdadera destreza y filosofía de las armas” (1675) de Francisco Antonio de Ettenhard y Abarca.
– “Compreension de la destreza” (1681) de Álvaro Guerra de la Vega.
– “Compendio y Philosophia y Destreza de las Armas” (1625) de Octavio Ferrara.
– “Método de enseñanza de maestros en la ciencia filosófica de la verdadera destreza matemática de las armas” (1639) de Luis Díaz de Viedma.
– “Oplosophia e Verdadeira Destreza das Armas” (1628) del portugués Diogo Gomes de Figueyredo.
– “Academie de l’Espée” (1630) del holandés Gérard Thibault d’Anvers.
DIFERENCIAS ENTRE LA ESCUELA ITALIANA DE ESGRIMA Y LA VERDADERA DESTREZA
Ambas tradiciones, la italiana y la española, presentan algunas diferencias en lo que a guardias, desplazamientos, ataques y graduación de la hoja concierne. Por supuesto, ya hemos visto que en cada una de ellas existen diferentes sistemas (cabe señalar que no hemos mencionado ni a la Escuela de Dardi, muy influyente en la tradición italiana, ni a la Destreza Vulgar, que se batió por siglos con la Verdadera Destreza), por lo que los rasgos mencionados a continuación son solo algunas que pueden resultar evidentes al observar a los tiradores de estas escuelas.
Verdadera Destreza (9):
-Uso de la postura de ángulo recto, que consiste en extender el brazo armado en línea recta en dirección al oponente, formando un ángulo de 90 grados con respecto al suelo.
-Uso de la geometría, particularmente círculos y líneas imaginarios, para desplazarse y realizar acciones que permitan obtener un ángulo favorable para atacar.
-Uso de estocadas y cuchilladas (heridas dadas con el filo de la espada).
-Graduación de la espada en diez o doce partes desde la punta a la guarnición, dependiendo de la fuente. A ello se le denomina “grados de fuerza”, en indican precisamente el grado de fuerza que se puede ejercer con cada una de estas partes cuando la espada ejerce presión contra la espada del oponente.
-Seis posiciones de la mano con la espada.

Escuela Italiana de Esgrima (10) (11)
-Uso de guardias más bajas, con las rodillas flexionadas y el cuerpo inclinado ligeramente hacia adelante o hacia atrás, y el codo también flexionado.
-Uso de la “linea direttrice” para realizar acciones, la cual es una línea recta que va del pie del tirador al pie de su oponente, lo que implica que las acciones se realizan a lo largo de esta línea recta imaginaria.
-Uso prolijo de estocadas; existen cortes, pero son un recurso poco empleado.
-Las espadas roperas empleadas en los sistemas italianos suelen contar con una hoja más larga pero también más delgada que las roperas usadas en los sistemas españoles.
– Graduación de la espada en dos, cuatro o cinco partes desde la punta a la guarnición. Por ejemplo, Capoferro menciona dos, forte (fuerte) y debole (débil), pero Fabris divide la espada en cuatro secciones: prima, seconda, terza y quarta.
Referencias
(1) La espada ropera. https://www.aceros-de-hispania.com/. Recuperado de: https://www.aceros-de-hispania.com/infer.asp?ac=12&trabajo=listar&pa=espada-ropera&sg=espada-ropera
(2) La espada ropera. https://www.aceros-de-hispania.com/. Recuperado de: https://www.aceros-de-hispania.com/infer.asp?ac=12&trabajo=listar&pa=espada-ropera&sg=espada-ropera
(3) Ridolfo Capo Ferro da Cagli ~ Wiktenauer ~☞ Insquequo omnes gratuiti fiant. https://www.wiktenauer.com/wiki/Main_Page. https://www.wiktenauer.com/wiki/Ridolfo_Capo_Ferro_da_Cagli
(4) Capo Ferro, R. (1610). Gran Simulacro dell’Arte e dell’Uso della Scherma, El Arte de Esgrimir, Capítulo III, sección 36.
(5) Salvator Fabris. https://www.wiktenauer.com/wiki/Main_Page. https://www.wiktenauer.com/wiki/Salvator_Fabris
(6) Jerónimo Sánchez de Carranza ~ Wiktenauer ~☞ Insquequo omnes gratuiti fiant. (2020, 4 junio). https://wiktenauer.com/wiki/Main_Page. https://wiktenauer.com/wiki/Jer%C3%B3nimo_S%C3%A1nchez_de_Carranza
(7) Luis Pacheco de Narvaez ~ Wiktenauer ~☞ Insquequo omnes gratuiti fiant. https://wiktenauer.com/wiki/Main_Page. https://wiktenauer.com/wiki/Luis_Pacheco_de_Narvaez
(8) Real Academia de la Historia. Francisco Lorenz de Rada y Arenaza. http://dbe.rah.es/biografias/49568/francisco-lorenz-de-rada-y-arenaza
(9) Asociación Española de Esgrima Antigua. (2009). Glosario de términos de la destreza de las armas. http://www.esgrimaantigua.com/
(10) ARMA – The Association for Renaissance Martial Arts, & Leoni, T. (2002). Italian Rapier Glossary. http://www.thearma.org/. http://www.thearma.org/rapierglossary.htm
(11) Toro, E. (2018, 3 de julio). How do Spanish and Italian rapier fencing differ from each other? – Quora [Comentario sobre el artículo “How do Spanish and Italian rapier fencing differ from each other?”]. https://es.quora.com/. https://www.quora.com/How-do-Spanish-and-Italian-rapier-fencing-differ-from-each-other#:%7E:text=The%20two%20systems%20differ%20in,and%20ready%20to%20pounce%20forward.
Ilustraciones
Figura 1. CarlosVdeHabsburgo. (2013, 4 junio). ESPADAS ROPERAS [Fotografía]. https://commons.wikimedia.org/wiki/Main_Page. https://commons.wikimedia.org/wiki/File:ESPADAS_ROPERAS.jpg
Figura 2. Darkwood Armory. (2020, 22 mayo). Loop and ring guarded Sideswords [Fotografía]. http://www.darkwoodarmory.com/. http://www.darkwoodarmory.com/index.php?main_page=product_info&cPath=1_50&products_id=688#&gid=1&pid=01
Figura 3. Tomada de Dumas, A. (1844). Los Tres Mosqueteros. Ediciones Altaya , S.A. Travesera de Gracia, 17. 08021 Barcelona, página 54.
Figura 4. Museo Artes y Costumbres Populares de Sevilla. (s. f.). Espada ropera con guarnición de lazo [Fotografía]. http://www.museosdeandalucia.es/web/museodeartesycostumbrespopularesdesevilla/inicio. http://www.museosdeandalucia.es/web/museodeartesycostumbrespopularesdesevilla/obras-singulares?p_p_id=101_INSTANCE_GRnu6ntjtLfp&p_p_lifecycle=0&p_p_state=normal&p_p_mode=view&p_p_col_id=column-2&p_p_col_count=1&_101_INSTANCE_GRnu6ntjtLfp_delta=10&_101_INSTANCE_GRnu6ntjtLfp_keywords=&_101_INSTANCE_GRnu6ntjtLfp_advancedSearch=false&_101_INSTANCE_GRnu6ntjtLfp_andOperator=true&p_r_p_564233524_resetCur=false&_101_INSTANCE_GRnu6ntjtLfp_cur=5
Figura 5. Espada ropera con guarnición de conchas. [Fotografía]. https://armasantiguas.com/?product=espada-ropera-con-guarnicion-de-conchas-espana-2a-mitad-siglo-xvii-hoja-toledana-siglo-xviii
Figura 6. Espada ropera con guarnición de taza. [Fotografía]. https://armasantiguas.com/?product=espada-ropera-con-guarnicion-de-taza-espana-finales-siglo-xvii-2
Figura 7. Wilson, W. Guardias en la tradición italiana de esgrima [Ilustración]. http://www.marozzo.org/
Figura 8. Chidester, M. (2012, 6 octubre). Capo Ferro 6 [Imagen]. https://www.wiktenauer.com/wiki/File:Capo_Ferro_6.jpg
Figura 9. Wilson, W. E. (1999). Tratatto Della Seconda Guardia [Transcripción Digital]. En Lo Schermo, overo Scienza d’Arme de Salvatore Fabris (1606) (Digital Transcription Copyright 1999, William E. Wilson ed.).
Figura 10. Tomada de Pacheco de Narváez (1600). Las grandezas de la espada. [Ilustración]. Madrid, herederos de Juan Iñiguez de Leguerica. En Saucedo Morales, F. (1997) Jerónimo Sánchez Carranza y la Escuela Española de Esgrima, Madrid, p. 229.
Figura 11. De la Filosofia de las Armas y de su Destreza y la Aggression y Defensa Cristiana. [Ilustración]. https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Jer%C3%B3nimo_Carranza.jpg
Figura 12. Tomada de Carranza, J. (1582). Diálogos de la filosofía de las armas y de su destreza, y de la agresión y defensión cristiana. [Ilustración]. En Saucedo Morales, F. (1997) Jerónimo Sánchez Carranza y la Escuela Española de Esgrima, Madrid, p. 130.